Frente a los hechos ocurridos esta madrugada, estamos muy preocupados por continuidad de la industria del transporte, los dos ataques ocurridos en menos de diez días golpean las fuentes laborales, el animo y la seguridad de nuestros conductores y familias.
No entendemos por que estos atentados se focalizan en la industria del transporte cuya misión no es otra que aportar al funcionamiento y progreso del país.
Solicitamos al estado, no solo al gobierno, que garantice los derechos constitucionales asociados a estos eventos, necesitamos el derecho a seguridad y a ejercer una actividad económica en un ambiente laboral saludable.
Estos atentados han generado una sensación de inseguridad en nuestra industria afectando principalmente a nuestros conductores y sus familias, también a las empresas de transporte y por consiguiente a todos quienes viven en zonas de conflicto, no entendemos por qué precisamente se han especializado en la quema de camiones poniendo en un alto riesgo la vida de los conductores, los que son amenazados con armas de fuego, muchas veces heridos de bala y/o golpeados.
Como asociación creemos que debemos enfrentar esta crisis de seguridad unidos como ciudadanos, junto al gobierno, policías, empresas forestales, transportistas, todos sus gremios y empleados. Por último la fuerza pública, impuesta producto del diálogo de estas mesas, no debe ser doblegada por ninguna otra organización.
EL DIRECTORIO